Presentes y necesarias las
encimeras (también llamadas mesetas en algunos países), brindan ese espacio
funcional, elegante y amplio tanto para los baños, como para las cocinas.
En la actualidad se pueden comprar
completamente diseñados y armados el conjunto de muebles para baño y cocinas,
incluyendo las encimeras, las cuales puedes elegirlas en diferentes materiales
desde diferentes PVC, plásticos, formicas, aluminio, inoxidables hasta de
granito fundido, natural, o mármoles de las más variadas tonalidades.
Precisamente
en el material con el que es confeccionada nuestra encimera donde tenemos que
concentrar nuestra decisión.
Vamos a describir las
características de los tres materiales que prefiero por sus características y
poderes decorativos: el metal, el granito y el mármol.
- Empezaremos con el mármol, posiblemente la roca de la cual se hayan concebido las creaciones artísticas – escultóricas – decorativas más grandiosas. Sin dudas el mármol siempre atrae, gusta, convence y maravilla. Ningún mármol es igual a otro, aun cuando sean del mismo color y tipo, además de que se comercializan en muchos colores. Siguen siendo utilizados para encimeras de cocinas, en baños, y para múltiples muebles. No me permito decirles que no es una opción espléndida, sin embargo todos sabemos que el mármol es muy caro, es frágil, y se puede quebrar o manchar con mucha facilidad por derramamiento de químicos y otras sustancias. Necesita de cuidados, y de restauración. Por eso deberás pensarlo seriamente antes de elegir este material para tus encimeras.
- - El granito es indudablemente hermoso, su brillo, sus impregnaciones que permiten la aparición de texturas y composiciones hermosas, así como su altísima resistencia al calor, golpes, químicos, lo convierten el material ideal para encimeras. Particularmente me gusta mucho, se mantiene con las mismas características de brillo y calidad por muchos años, es muy fácil limpiarlo y queda siempre como nuevo, además es mucho más económico que el mármol.
- - Finalmente el metal, material que se usa con mucha frecuencia para las encimeras o mesetas de las cocinas, sobre todo los aceros inoxidables. Es altamente recomendado el acero inoxidable, además se puede esterilizar sin que sufra ningún tipo de daño.